El Grito Infinito

llevamos un mundo nuevo en nuestros corazones

Mis primeros siete meses como vegetariano

Publicado por Álvaro en , , el 9.12.08


    Hoy se cumplen mis primeros siete meses como ovolactovegetariano. Sí, ya sé que los siete meses no son una celebración típica, pero no se me ocurrió hacerlo a los seis meses y no tengo paciencia para esperar hasta cumplir un año. Por mi mente siempre había rondado el amor por los animales y la vaga simpatía por el vegetarianismo; de pequeño quería ser veterinario (hasta que me dí cuenta de que me resultan insoportable la sangre y las vísceras), y de adolescente se me cruzó por la mente un par de veces la idea de volverme vegetariano, pero fugazmente. Desde hace un par de años, esta idea se hizo más y más recurrente, más machacona. Comencé a reducir el consumo de carne progresivamente, pero sin dar el gran salto en ninguna ocasión. Necesitaba un estímulo definitivo. Y ese estímulo llegó en forma de documental. Fui a la filmoteca a verlo, solo, en una sala con pocos espectadores. Fue una experiencia absolutamente catártica, purificadora, cruel y psicológicamente peligrosa. Fue una tortura insoportable, pero salí de ahí completamente renovado. Salí convertido, literalmente, en otra persona. Alguien que había dejado atrás el mundo disociado en el que los efectos de nuestro consumo están enterrados bajo la alfombra, en el que no es visible la relación causa-efecto. Salí de ahí siendo consciente de las consecuencias de nuestros actos.

      Recordemos brevemente las razones para ser vegetariano: evitar la tortura sistemática de cientos de millones de animales enfermos y enjaulados, ahorrar recursos naturales (la ganadería es un sumidero de recursos, ya que por ejemplo para conseguir un kilo de cerdo se necesitan 3'54 kilos de maíz), ser más ecológico (por ejemplo, los pedos de las vacas contribuyen considerablemente al cambio climático, por surrealista que parezca), decrecer en el consumo y ahorrar dinero (la agricultura es más sencilla y barata que la ganadería), mejorar la salud, coherencia con mis ideales libertarios...

      ¿Ha sido fácil o ha sido difícil? Bien, desglosaré mi experiencia por puntos, que son mucho más fáciles de leer y más amenos.
  • FAMILIA. En un primer momento mis padres no me apoyaron en absoluto, creían que iba a enfermar y morir en pocos años. Esto me hubiera importado poco de no ser porque, gracias a la burbuja inmobiliaria, vivo con ellos y tengo que comer lo que mi madre cocine, al menos al mediodía. Además, al convivir con ellos, el machacamiento psicológico al que me sometieron fue considerable. Éste ha sido sin duda el mayor problema al que me he enfrentado: conseguir que comprendieran que dejar de comer carne y pescado no sólo no es malo, sino que es beneficioso para la salud si se hace sabiamente. Finalmente lo han aceptado a regañadientes, pero ha sido toda una odisea. El punto de inflexión tuvo lugar cuando les leí casi íntegro el artículo de la Wikipedia sobre nutrición vegetariana; no obstante puedo estar seguro de que en Nochebuena voy a tener que comer un poco de carne para quedar bien, bajo pena de ostracismo familiar por raro.

  • AMIGOS. A diferencia de mis padres, los amigos y conocidos no se preocuparon por mi salud sino por la pérdida del placer de comer carne. Curioso, aunque previsible. Éste tipo de presión social absurda (del tipo "¡come un poco de jamón, que está buenísimo y no es carne!") no me importa en absoluto, la he manejado mucho mejor que la familiar.

  • PLACER. No he echado de menos la carne y el pescado en absoluto. Ni lo más mínimo, por increíble y falso que pueda sonar. Por ejemplo, soy incapaz de dejar por completo los dulces, la Coca-Cola, u otros alimentos dañinos. Sin embargo, no he sentido la más mínima nostalgia por la carne; lo digo completamente en serio. Supongo que puede deberse a que gracias al cambio de dieta he descubierto nuevos platos, nuevos sabores, nuevos ingredientes. He ampliado considerablemente los límites de los anodinos platos tradicionales gracias a las páginas web de recetas vegetarianas que podéis encontrar en los enlaces del blog.

  • SALUD. No sólo no me he vuelto anémico ni me han salido ojeras, sino que me encuentro muchísimo mejor que antes. Este cambio lo he notado en las últimas semanas de forma brutal. Tengo más energía y menos pesadez en la cabeza y el estómago. He perdido peso y estoy más fuerte (esto lo noto clarísimamente al pedalear en la bici estática).

  • NUTRICIÓN. No pretendo poner ahora a dar una explicación sobre nutrición vegetariana (aquí podéis leerlo con tranquilidad), pero básicamente se resume en: si eres ovolactovegetariano, tranquilízate. Las carencias que va a tener tu dieta, de tenerlas, van a ser ínfimas, insignificantes. Simplemente tienes que procurar llevar una dieta variada y respetar la pirámide de los alimentos (aquí tenéis la versión vegetariana). Pero vamos, sin obsesionarse: el queso y los huevos te aportan todas esas míticas proteínas de las que carecen los pobres vegetarianos. En el caso de los veganos, que no consumen nada que provenga de un animal (mi próximo objetivo), hay que llevar un poco más de cuidado. Pero, de nuevo, no hay ningún problema ni hay que tomar ninguna pastilla (necesariamente).

  • DISPONIBILIDAD DE LOS ALIMENTOS. Por último, comentaré un hecho que me parece importante: soy incapaz de localizar algunos de los ingredientes que se utilizan habitualmente en las recetas vegetarianas: tofu, seitán, queso vegano, patés vegetales, harina de garbanzo... Cosas de vivir en una provincia periférica. Otro aspecto importante a destacar sobre la disponibilidad de alimentos es el próximo descenso del transporte de mercancías como consecuencia del cénit del petróleo. ¿Podrán llegar a los supermercados de mi ciudad, en los próximos años, toda la variedad de vegetales y frutas que me permiten prescindir de la carne y el pescado? Bueno, creo que lo único que se puede hacer es esperar y ver qué pasa.
      En conjunto, pues, la experiencia está siendo positiva. Próxima parada: el veganismo.

16 comentarios:

Luis Tovar dijo... @ 9 de diciembre de 2008, 13:05

Mis felicitaciones por tu vegetarianismo, y desde aquí te mando muchos ánimos para tu futuro veganismo. Si me lo permites, quisiera hacerte algunas observaciones al respecto.

Comer queso animal o huevos es prácticamente lo mismo que comer carne. Los animales han sido esclavizados, explotados y finalmente asesinados tanto para lo uno como para lo otro. Carne, lácteos, huevos.... todos son productos de la misma criminal explotación.

De hecho, la tortura es, si cabe, todavía mayor y más cruel en el caso de las vacas y las gallinas explotadas por su leche o sus huevos, que en el caso de cerdos y pollos asesinados por su carne. Las vacas también serán asesinadas para obtener su carne, además de haber sido violadas mediante inseminación artificial y separadas de sus hijos, los terneros, destinados también para la matanza.

Aunque está bien tener una visión global para todo, el verdadero motivo para ser vegano son los animales: los demás animales, los que no son humanos, los que pueden sentir y sufrir y quieren vivir igual que nosotros. Aquellos cuyas vidas debemos respetar siempre igual que queremos que se respete la nuestra. Eso significa no esclavizarlos, no torturarlos ni asesinarlos, ni colaborar indirecta o indirectamente en que otros lo hagan. Y si se puede, tratar de impedir que otros humanos les causen daño.

La gran verdad que que es ocultada por los prejuicios en los que hemos sido educados es que no necesitamos comer animales para poder alimentarnos ni para cubrir nuestras necesidades nutricionales adecuadamente. La tierra nos aporta todos los alimentos que necesitamos los seres humanos. Ya sean proteínas, vitaminas o minerales o cualquier otro nutriente. Es por eso que no necesitamos a los demás animales para alimentarnos.

Todos los vegetales, salvo la fruta, tienen proteínas, los cereales, las legumbres y los frutos secos tienen un alto contenido proteico, suficiente para cubrir nuestras necesidades diarias. Y ocurre lo mismo con cualquier otro nutriente, ya sea el calcio, el hierro, el cinc o la vitamina E. No necesitamos absolutamente nada de los animales para alimentarnos bien.

Esos productos veganos que mencionas (seitán, tofu, quesos, patés, harina de garbanzo) aportan más variedad a la ya de por sí variada dieta vegetariana, pero tampoco son necesarios ni nutricionalmente ni para disfrutar a la hora de comer. Me extraña que no haya herbolarios donde tú vives o que no se puedan obtener por correo. Si el problema es el precio también se pueden cocinar en casa a partir de productos básicos que normalmente se encuentran el cualquier supermercado, como la soja o las almendras.

Sin duda es muy triste la habitual oposición e incompresión de las familias hacia el vegetarianismo de algunos de sus miembros. Los padres, que normalmente no tienen ni la más mínima idea sobre nutrición, al igual que los médicos, se permiten el lujo de dar lecciones sin saber ni de qué están hablando.

Teniendo en cuenta el contexto en el que te mueves tu evolución vegetariana es todo un progreso que puede todavía continuar mucho más allá. Sólo te puedo pedir que sigas cuestionándote todo lo que te han enseñado hasta ahora, todos los prejuicios en los que hemos sido educados, y que no cedas en tu postura personal. Ni siquiera en Nochebuena o cuando fuere. Son ellos los que están profundamente equivocados, no tú. Si cedes en tus convicciones das mal ejemplo ante los demás de falta de seriedad de tu postura, y también ante ti mismo.

Siempre es motivo de alegría para mí conocer gente con espíritu crítico que se replantea el mundo en el que vivimos. Me alegra haber conocido tu blog.

El verdadero cambio acerca de cualquier cosa empieza en nosotros mismos, en los actos que llevamos a cabo en nuestra vida cotidiana: a la hora de comprar y consumir, cuando nos relacionamos con otras personas, en nuestro plato de comida.

Un saludo vegano

Álvaro dijo... @ 9 de diciembre de 2008, 13:14

Muchísimas gracias por tu inspirador comentario. Lo cierto es que estoy de acuerdo en todo, y la única razón por la que no soy vegano es por depender de la comida que cocinan en casa. Comprendo perfectamente que tomar leche y huevos implica también tortura, pero ahora mismo no me queda otra. ¡Bastante he tenido que aguantar por ser vegetariano! En cuanto me independice, la cosa cambiará.

Un saludo.

Anónimo dijo... @ 9 de diciembre de 2008, 16:39

POR UN MOMENTO ME HAS PREOCUPADO, TU DESCRIPCION DE LA INICIACION AL VEGETARIANISMO PARECE UN LAVADO DE CELEBRO EN TODA REGLA

YO COMO POCA CARNE, CASI COMO CLINT EASTWOOD, PERO NO QUIERO CONVERTIR ESO EN UNA POSTURA DE VIDA, CREO QUE ESTE TIPO DE COSAS DEBEN SER CIRCUNSTANCIALES. AL FINAL COMO MENOS EMBUTIDOS Y CARNES FUERTES POR LO MAL QUE SIENTAN, COMO ALGUNOS MEJICANOS.

ACABO DE ACORDARME QUE TAMBIEN ESTUVE 3 SEMANAS ALIMENTANDOME DE ZUMO DE MELOCOTON SANTAL, ERA EL MAS ESPESO DEL MUNDO.

CREO QUE TAL Y COMO ESTAN LAS COSAS NO HAY MUCHA DIFERENCIA PARA EL MUNDO EN COMER CANNNE O VELDURA, A LO MEJOS LA SOJA SALE DE UN BICHO MUTADO GENETICAMENTE.

LO MEJOR SERIA VIVIR EN EL CAMPO Y CULTIVAR TUS PROPIAS COSILLAS, AUNQUE A VER DE DONDE SACAS LAS SEMILLAS (QUE NO SEAN DE ESAS ESTERILES A LA SEGUNDA GENERACION QUE VENDEN POR AHI).

BUENO, SEGURO QUE TE SIENTES MÁS SANO Y TIENES MEJORES DIGESTIONES, ANIMO.

Pequeño Schopenhauer dijo... @ 9 de diciembre de 2008, 19:35
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Pelo dijo... @ 9 de diciembre de 2008, 19:35

Yo llevo casi año y medio como ovolactovegetariana, pero tengo mis dudas sobre el veganismo. Muchas páginas de internet pregonan a los mil vientos su genialidad, pero sin ningún sustento científico. No conozco a ningún nutriólogo que esté de acuerdo con el veganismo, querámoslo o no, necesitamos la proteína animal. NADA sustituye la proteína animal.

CeciliaV dijo... @ 10 de diciembre de 2008, 19:52

Como hace ya más de 10 años que soy vegetariana
Quería advertirte que estas reacciones que has recogido hasta ahora van a sucederte SIEMPRE, al menos hasta que alguna vez decidas dejar de serlo

Ser vegetariana me ha resultado más difícil que, por ejemplo, abandonar la religión católica en la que mi familia me había criado. No por extrañar el sabor, ni nada de eso, sino por los "no conversos" a los que parece que increíblemente tu opción no carnívora les afectara su propia vida.

Y la única contra no es que cada vez que vayas a una reunión familiar o laboral o con amigos te insistan 2, 4 10, 100 veces con que te comas “ese bifecito de lomo que está tan rico”, sino con cuestiones aún más incomprensibles como encontrarte en un vuelo transatlántico , y que a la hora de la comida, cuando destapas lo que has pedido más o menos 3 veces (desde el momento del pago de ticket, luego por teléfono y en al embarcar), como un menú vegetariano, sea un filet de pescado al horno!!!! Y que encima los empleados de la aerolínea te discutan diciendo que “EL PESCADO NO ES CARNE” y que siempre lo servían para vegetarianos y jamás nadie se había quejado.

Y ni te cuento lo que dicen los médicos!!! Hasta la ginecóloga me ha tratado de convencer de abandonar el vegetarianismo!!! (lo juro!! Es real!!)

No te lo digo por mala onda o para desearte que “la acabes ya con este capricho!”(jaja) sino para decirte que que decidirte por el vegetarianismo parece ser que no es una decisión idividual!!! Así que unete a la Resistencia!!!!

Jaja
Suerte

(si en la ciudad donde vives hay algún barrio chino, allí en las despensas se suelen encontrar tofu y seitán, y en los locales de productos armenios-árabes-del medio oriente encontras harina de garbanzos)

Ignacio Cervera dijo... @ 12 de diciembre de 2008, 1:41

Hey yo también soy ovo lacto y bueno, lo más difícil ahora es ver como gente a la que consideraba amiga se mofó de mi cuando me hice vegetariano por idealista y etc etc etc.
Y de vez en cuando algún chiste fácil por parte de colegas en plan de quieres?? y de repente todos repiten la gracia (quieres quieres quieres ?¿¿??¿)

En familia, la única que no lo comprende es mi abuela que además se enoja cuando no como de la paella porque esta cocinada con animales.

Les pasaré ese documental a mis colegas. Seguro que les gusta.

Ignacio Cervera dijo... @ 12 de diciembre de 2008, 1:43

Posdata: Hola y adios. Y que tienes un blog interesante.
Fin

Train dijo... @ 12 de diciembre de 2008, 10:33

Srta Pelo sí que hay proteínas vegetales que no tienen nada que envidiar a la animal, por ejemplo las ortigas (con más proteína incluso que la soja)

Tremendelirius dijo... @ 15 de diciembre de 2008, 17:37

personalmente reconozco que sería completamente incapaz de dejar de comer carne. Y no es que me guste especialmente pero hay cosucas a las que no puedo renunciar.

Respecto a los motivos me parecen muy loables y de hecho te felicito por tener coherencia moral en ese sentido.

Hay por ejemplo gente que no comprendo porque se empeña en tomarla con las corridas de toros por decir que son un espectaculo abominable y luego se comen un fileton de ternera o unos tacos de jamon.

Alguien ha visto alguna vez una matanza de un cerdo. Es algo brutal como le rajan la tripa a un cerdo. En fin no sigo que le quito el hambre a mas de uno. A mi se me quitaron las ganas de comer carne durante una buena temporada.

abrahamjpalma dijo... @ 24 de diciembre de 2008, 12:08

¿Alguien ha pensado en el sufrimiento de las pobres verduras? A ellas tampoco les gusta que se las coman, y que sientan menos que otros seres vivos más ágiles no significa que no sientan. Deben sufrir incluso más, porque desde que las arrancas hasta que te las comes van muriendo poco a poco, agonizando.

Lástima que no podamos vivir como ellas, que solo toman sustancias inorgánicas y su fuente de energía es el sol, sin dañar a ningún ser vivo. (Se hacen la competencia, las hay que se parasitan unas a otras, y algunas incluso cazan insectos, pecados menores al lado de los nuestros).

Álvaro dijo... @ 24 de diciembre de 2008, 12:12

"que sientan menos que otros seres vivos más ágiles no significa que no sientan"

http://es.wikipedia.org/wiki/Sistema_nervioso

rocio dijo... @ 11 de abril de 2009, 21:37

abrahamjpalma sos un idiota, para que hablas al pedo ?? mejor informate y despeus habla chao bobo

Rayelén dijo... @ 25 de febrero de 2010, 15:21

Hola!
Buscando frases de la biblia que dejan claro que los animales fueron creados por Dios para ser sometios a los hombres para un trabajo contra la violencia del hombre para con los animales de mi intituto he llegado hasta aquí y me he detenido a leer un poco sobre tu experiencia. He leido cosas muy graciosas que me pasaron a mi también, por ejemplo lo de mis amigos, que no entienden por que son vegetariana y siempre hacen el cometario: "te dan pena los animalitos" o "aunque tu no comas al animal lo van a matar igual" en fin... son incontables esos comentarios y no dejan de hacerlos, no es cosa de la novedad, ya que llevo mas de tres años siendo vegetariana (empece a los 15) y aun me encuentro con comentarios de ese tipo. ¿No entienden que es una cuestion moral? yo soy feliz siendo vegetariana, y no por frenar la matanza de animales ni frenar la contaminacion, sino por no contribuir en ello.
En fin, que me enrollo mucho, jeje. Mi proximo objetivo tambien es volverme vegana, cosa que hare poco a poco, asi que me gustaria ver como vas evolucionando hacia el camino vegano a ver si me puedes ayudar (cosa que ya has hecho enseñandome que existe el queso vegano)
te dejo mi mail (no tengo blog) para que me comuniques, si tienes tiempo, cuando actualices el blog.rayelenferrando@hotmail.com
Animo! y a seguir con nuestras cuestiones morales, que aunque muchos no lo crean, hacen mucho...
un saludo. Rayelén

Rayelén dijo... @ 25 de febrero de 2010, 15:23

Hola!
Buscando frases de la biblia que dejan claro que los animales fueron creados por Dios para ser sometios a los hombres para un trabajo contra la violencia del hombre para con los animales de mi intituto he llegado hasta aquí y me he detenido a leer un poco sobre tu experiencia. He leido cosas muy graciosas que me pasaron a mi también, por ejemplo lo de mis amigos, que no entienden por que son vegetariana y siempre hacen el cometario: "te dan pena los animalitos" o "aunque tu no comas al animal lo van a matar igual" en fin... son incontables esos comentarios y no dejan de hacerlos, no es cosa de la novedad, ya que llevo mas de tres años siendo vegetariana (empece a los 15) y aun me encuentro con comentarios de ese tipo. ¿No entienden que es una cuestion moral? yo soy feliz siendo vegetariana, y no por frenar la matanza de animales ni frenar la contaminacion, sino por no contribuir en ello.
En fin, que me enrollo mucho, jeje. Mi proximo objetivo tambien es volverme vegana, cosa que hare poco a poco, asi que me gustaria ver como vas evolucionando hacia el camino vegano a ver si me puedes ayudar (cosa que ya has hecho enseñandome que existe el queso vegano)
te dejo mi mail (no tengo blog) para que me comuniques, si tienes tiempo, cuando actualices el blog.rayelenferrando@hotmail.com
Animo! y a seguir con nuestras cuestiones morales, que aunque muchos no lo crean, hacen mucho...
un saludo. Rayelén

Anónimo dijo... @ 8 de enero de 2013, 2:42

permitidme publicar esto:
este año en los blogs de lablogoteca.20minutos por primera vez puede que gane un blog vegano. Sería una hecho histórico en un país tan maltrataanimales como España. Y además un blog hecho por dos encantadores cocineros españoles argentinos. Quien ayuda con su voto para queno gane el blog comecadáveres ?(que está encabezando la votación)
Para votar a Dimension vegana se puede hacer en tres minutos,

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