El Grito Infinito

llevamos un mundo nuevo en nuestros corazones

Ejemplo de manifiesto anarquista para las acampadas

Publicado por Álvaro en , , el 20.5.11




[Este texto es "copyleft". Siéntete libre de tachar o añadir lo que te dé la real gana, tan sólo te pido que si lo usas en tu discurso me lo notifiques. El objetivo del manifiesto ha sido su inmediatez, no detenerse en profundos análisis intelectuales, para los cuales habrá otros momentos.]

Como alternativa al manifiesto de Democracia Real Ya y como alternativa a lo que vemos que es el discurso mayoritario de las acampadas, las y los anarquistas queremos expresar nuestro punto de vista.

1º) El capitalismo es una crisis permanente. Esta crisis financiera concreta que vivimos es sólo una de las múltiples formas en que se pueden manifestar las fuerzas destructivas del capital. Para la mayoría de la población mundial no existe el concepto de "crisis", ya que siempre han vivido instalados en una emergencia diaria por la supervivencia. El materialismo de nuestra sociedad se basa en la explotación sistemática de los desheredados de la tierra; y dentro de nuestra sociedad existe una masa permanente de pobreza y exclusión social en la que cualquiera podemos caer, con crisis o sin ella. A la izquierda institucional se le llena la boca criticando el neoliberalismo, cuando en realidad toda la historia del capitalismo es la historia de la barbarie, el egoísmo, la esclavitud, la alienación, la guerra y la destrucción de los ecosistemas.

2º) El estado es el principal garante del capitalismo. La izquierda institucional pretende reforzar el estado para que éste ponga barreras al capital, sin tener en cuenta dos cosas: primero, que los estados son los que han rescatado al capital de su colapso, demostrando así el poder que tienen para modificar el curso de la economía cuando les interesa; y segundo, que el capitalismo necesita esas regulaciones y barreras para que su funcionamiento depredador no le lleve al aniquilamiento. Consideramos que regular el capitalismo es perfeccionarlo, y por tanto perpetuarlo.

3º) El parlamentarismo es una dictadura implícita. Al votar cada cuatro años estáis eligiendo a las personas que van a dirigir nuestros destinos a su voluntad sin tener en cuenta al pueblo. Estáis eligiendo a vuestros propios amos. El poder corrompe, y el poder absoluto corrompe absolutamente. No nos interesa si se convocan uno, dos o cien referéndums; no queremos que nadie nos dé limosnas. Queremos que el poder resida única y exclusivamente en manos del pueblo, organizado en asambleas soberanas como ésta. Sólo la voz del pueblo dirá cómo ha de vivir el pueblo.

4º) La próxima revolución deberá basarse en la igualdad, la ética y el poder popular, y no en el materialismo. No buscamos reingresar en la clase media, buscamos que desaparezcan las clases. No queremos una solución a corto plazo, queremos una solución permanente. No nos interesa un mundo en el que los objetos y el dinero sean el centro de atención; queremos ser ricos en humanidad, compañerismo, valerosidad y resistencia ante la adversidad. El capitalismo y el bienestarismo han aniquilado nuestro espíritu de comunidad, es hora de recuperarlo.

5º) No podemos luchar sólo por nosotros. No olvidemos a todos los que sufren y que no tienen voz. No olvidemos a los inmigrantes, a los que el sistema explotó en su momento y ahora desecha como pañuelos usados. No olvidemos a los permanentemente excluidos y marginados. No olvidemos a los pueblos oprimidos: el palestino, sometido a un lento exterminio; el libio, aplastado entre el Imperialismo petrolero y un megalómano apoyado por Occidente; el saharaui, el congoleño, el ecuato-guineano, el mapuche y tantos y tantos otros. No olvidemos a la madre tierra, a los ecosistemas que nos sustentan, el mayor patrimonio de los pueblos. No olvidemos a los animales que son tratados como basura en las infernales granjas industriales. Compañeros: ¡no olvidemos!

No queremos que nadie gobierne nuestras vidas, no queremos obedecer. No queremos pleno empleo si tenemos que dedicarnos a tareas denigrantes e improductivas. No queremos un capitalismo sostenible que acabe con la Naturaleza más lentamente. No queremos un crecimiento perpetuo de la economía. No queremos basar nuestra vida en recursos energéticos y materiales que desaparecen. No queremos protagonizar noticiarios porque los medios son los perros de presa de los mercados. No queremos la aprobación de los gobernantes sino sólo la de nuestros iguales. No queremos ejércitos, no queremos guerra, no queremos oprimir a nuestros semejantes, no queremos participar en la sociedad del espectáculo, no queremos ser marionetas en vuestras manos.

¡Lo queremos todo! ¡Ni un paso atrás!

9 comentarios:

Ángel dijo... @ 21 de mayo de 2011, 15:19

Buenas compañer@

según lo que estoy viendo yo, este manifiesto solo se diferencia del manifiesto de las acampadas, en el punto 2, es decir:

2º) El estado es el principal garante del capitalismo.

Todos los demás están contemplados en los manifiestos de las acampadas...

Álvaro dijo... @ 21 de mayo de 2011, 22:14

Pues, lo siento, Ángel, pero hemos debido ir a acampadas diferentes...

Anónimo dijo... @ 22 de mayo de 2011, 14:27

:)

Sosiegas dijo... @ 22 de mayo de 2011, 14:39

La tónica de las acampadas y del movimiento DRY suele ir por lamentarse de la supuesta incompetencia de la clase política para "salir de la crisis". De modo que, parece ser, hace 6 años, cuando el dinero corría alegremente, no veían motivos para quejarse y movilizarse.

Lo que Álvaro explica en el primer punto es que el problema, para quien quiera un cambio profundo en la sociedad, no es "salir de la crisis", sino "salir del sistema". Pues basta con profundizar un poco en la indagación reflexiva para darse cuenta de que el capitalismo no puede existir sin crisis, tanto puntuales (aquí o allí; ayer o mañana) como estructurales, en forma éstas últimas de bolsas de pobreza casi continentales. Por eso es ilusorio reclamar un capitalismo "sostenible", o pensar que la solución de África pasa por desarrollarse bajo el prisma capitalista. De ahí nuestra frustración al comprobar la ceguera estatolátrica que impide constatar el papel rector y culpable de los Estados en este sistema.

Respecto al parlamentarismo, el movimiento 15-M lo que está pidiendo es su reforma (ley electoral, voto en blanco, etc.), de modo que al no criticarlo como tal, está aceptando que su naturaleza es realmente democrática, a la espera de pulir ciertos detalles, que es lo que piden.

El economicismo es palpable en las principales reivindicaciones, todo parece resumirse en problemas de índole adquisitivo, salarial, impositivo, prestacional. De ahí que parezca una simple queja de quienes ven dificultada su misión de convertirse en clase media a la veintena de años cumplidos. No se ven llamamientos a una renovación espiritual, a un cambio profundo en los valores humanos.

Dicho esto, yo voy a seguir apoyando este movimiento.

Álvaro dijo... @ 22 de mayo de 2011, 14:48

Opino lo mismo que Manu. Yo seguiré apoyando al movimiento mientras siga siendo horizontal. En el momento en que se forme la más mínima jerarquía, hasta luego.

Ángel dijo... @ 23 de mayo de 2011, 1:38

1º Punto - uno de los lemas mas coreados en DRY es A - Anti - Anticapitalismo

3º Punto - Por eso mismo la forma de organizarse en los campamentos es Asamblearia

4º Punto - En el campamento de Murcia se han organizado debates sobre feminismo e igualdad

5º Punto - Este punto está claro, creo yo.

Álvaro dijo... @ 23 de mayo de 2011, 8:08

Aunque es cierto que en la manifestación del 15-M se coreó eso por una parte de la gente, en la acampada no he vuelto a ver nada parecido.

Ángel dijo... @ 23 de mayo de 2011, 11:31

ayer si aparecio de nuevo el grito y yo lo llevo oyendo bastante, tanto en la gente como en algunos carteles que se ven por ahi

Álvaro dijo... @ 23 de mayo de 2011, 11:33

Bueno, "dios te oiga", como se suele decir. :-)

No me pude quedar por lo tarde que acaba esto, vuelvo a decirlo por enésima vez: ¡algunos tenemos que madrugar!

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